Actores
Existen cuatro categorías mayores de actores en el nō y ocho categorías principales de papeles:
Shitekata: corresponde al tipo de actor de obras más representado. Estos actores interpretan distintos papeles, Shite (actor principal), Tsure (acompañante del shite), Jiutai (coro, usualmente 6-8 actores) y Koken (ayudantes de escena, usualmente 2-3 actores).
Wakikata: personifica los papeles de waki, personaje secundario que son la contraparte del Shite.
Kyogenkata: estilo de obra reservado a los actores que desempeñan los papeles populares en el repertorio del nō y toda la distribución de las piezas kyōgen (representadas como intermedio entre dos obras nō).
Hayashikata: son los instrumentistas que tocan los cuatro instrumentos utilizados en el nō.
Los actores que interpretaran papeles de shite y waki son instruidos separadamente, bajo la dirección de profesores diferentes. Es imposible pasar de una categoría a otra, lo que aumenta el contraste, en la obra, entre los dos tipos de protagonistas.
El Shite
El shite es el actor que interpreta al personaje principal de la obra y quien ejecuta las danzas. Debe poder interpretar una extensa gama de personajes, yendo de niño a dios, pasando por anciano o mujer. Todos los actores son hombres y la naturaleza de un personaje es señalada por su traje, muy elaborado, y sobre todo por su máscara, más pequeña que el tamaño real. Sólo los actores shite se ponen máscaras, siendo capaces de concentrar la esencia del personaje que interpretan y de esta forma alcanzar una mayor profundidad emocional. Cuando el personaje es un hombre de edad madura, el shite actúa sin máscara. Debe entonces guardar una cara severamente inexpresiva, al igual que las otros personajes presentes sobre escena, y actuar como si llevara una máscara (hitamen).
El actor implicado como shite puede también verse obligado a actuar como personaje secundario cuando éstos son mujeres, niños, animales o seres sobrenaturales.
El Waki
El papel esencial del waki es interrogar al shite para darle una razón para efectuar su danza y de vincular a las criaturas de otro mundo representadas por el shite con el mundo real. Actuando sin máscara, el waki es un humano varón que vive en el presente en el momento de la pieza. Puede tratarse de un aristócrata, cortesano, enviado, sacerdote, monje, samurai o de un hombre del pueblo. Su función social es indicada por su traje.
Piezas
Una típica representación de nō involucra todas las categorías de actores. Existen aproximadamente 250 obras que son desarrolladas en el repertorio actual las cuales pueden ser distribuidas en dos grupos según su realismo, o en seis categorías organizadas en líneas genereales por tema. Esto último influirá sobre el momento en que una obra se representa durante una jornada tradicional de nō, que esta compuesta por una obra de cada una de las categorías.
Genzai nō y mugen nō
El genzai nō designa las partes realistas. El personaje principal es entonces un ser humano vivo, y la historia se desarrolla en tiempo real. La obra se centra en torno a los sentimientos del personaje, siempre en una situación dramática. El diálogo hablado constituye el medio esencial de la exposición.
El mugen nō, por otro lado, es un ruego a criaturas imaginarias, divinidades, fantasmas o demonios. Estas criaturas siempre son actuadas por el shite. Las obras se dividen entonces en dos actos. En el primero, la criatura se le aparece al waki, que ha venido a visitar un lugar consagrado o famoso, bajo el aspecto de un ser humano. Durante el segundo, se revela y realiza una danza. Este segundo acto se supone que se desarrolla en un sueño o en una visión del waki, de ahí el nombre de mugen, que designa este tipo de experiencia.
El tema de los mugen nō hace generalmente referencia a una leyenda o a un obra literaria. Escrito en una lengua anticuada y poética, el texto se canta según entonaciones obedeciendo a normas estrictas de kata (formas impuestas por la tradición). Del mismo modo, los protagonistas adoptan para este tipo de obras un paso deslizado característico, y se codifican mucho los propios movimientos de las danzas. Esta estilización extrema reparte a cada movimiento y entonación un significado convencional propio.
La puesta a punto de las características esenciales del mugen nō se asigna a Zeami. Más que intentar reconstruir la belleza sobre la escena, su objetivo es suscitar en la audiencia un estado de ánimo consustancial a la contemplación de la belleza, su referencia es el sentimiento experimentado ante la belleza de una flor.
Los seis tipos de obras
Como se mencionó, las obras de nō generalmente se clasifican por tema, que regulan su orden de representación. Este orden constituye una herencia del tiempo del shogunato Tokugawa:
Okina/Kamiuta
1ª Categoría: Obras de Divinidades
2ª Categoría: Obras de Guerreros
3ª Categoría: Obras de Mujeres
4ª Categoría: Obras Misceláneas
5ª Categoría: Obras de Demonios
Okina/Kamiuta
Se trata de una obra única que combina danza y ritual shinto. En todo rigor, no se trata de nō, pero es una ceremonia religiosa que utiliza el mismo repertorio de técnicas que el nō y el kyōgen. Representa la bendición concedida por una divinidad a la asistencia. La máscara es entonces un objeto religioso en pleno derecho.
Estas obras también se conocen bajo el nombre de Sanban, "los tres rituales", en referencia a las tres partes esenciales Chichi-no-jo, Okina, y Kyōgen Sanba-Sarugaku. El papel principal lo ejecuta un actor de nô y el papel secundario es realizado por un actor de kyōgen.
Estas obras no forman parte de las jornadas de nō y se realizan con motivo del año nuevo o como representaciones especiales, presentándose siempre al principio del programa.
Nō de divinidades
Llamadas también waki nō, tienen un divinidad como personaje principal. Típicamente, el primer acto es el encuentro de un sacerdote con otro personaje en un lugar famoso o en marcha hacia tal lugar. Al final del acto, el otro personaje se revela una divinidad. Ésta, o un divinidad vinculada, vuelve de nuevo durante el segundo acto para realizar una danza y bendecir la asistencia, un templo o las cosechas. Ejemplos de obras: El Viejo Pino, Los Dos Pinos, Po Chu-i, El Arco del templo de Hachiman, La Diosa de los cerezos, La Reina-madre del Oeste, Kamo, Los Dioses del templo de Shirahige, La Isla de los bambúes de la diosa Benten, etc.
Nō de guerreros
En japonés shura-nō, estas obras se centran en torno al espíritu de guerreros muertos caídos en el infierno después de su muerte. Vuelven entonces para contar la vida durante el ashura (infierno de la guerra), o su última batalla. Ejemplos de obras: El General Tamura-maru, Yoshitsune en Yashima, El Carcaj de Kagetsue, El Belicoso Michimori, El Ahogamiento de Kyotsune, El Viejo Sanemori, Minamoto no Yorimasa, La Dama Tomoe.
Nō de mujeres
Llamadas «nō de mujeres» o «nō con peluca» (kazura-nō), estas obras se desarrollan en torno al espíritu de mujeres hermosas, de jóvenes nobles, o incluso de plantas o diosas. El momento esencial de estas obras es una danza graciosa.
Nō misceláneas
Esta categoría agrupa las obras nō que no pertenecen a los otros grupos. Representan en general a un personaje femenino que cae en la locura, por celos o a raíz de la muerte de un ser querido.
Nō de demonios
También llamadas «nô del final» (kiri nō), estas obras incluyen a un personaje sobrenatural, un demonio, rey-dragón u otro espíritu de este tipo, aunque el personaje central de algunas sea un joven simplemente noble. Estas partes tienen un ritmo más rápido, apoyado por la utilización del tambor aplanado (taiko). Una rítmica danza constituye su punto culminante, que es también el fin de la jornada de nō.
El nō en el siglo XXI
Existen alrededor de 1500 actores profesionales de nō en Japón, y esta forma de arte está empezando a crecer nuevamente. Contrariamente al kabuki, que siempre ha sido muy popular, el nō poco a poco se volvió una representación sólo para una determinada elite intelectual. Las cinco escuelas existentes de actuación nō son: Kanze (観世), Hosho (宝生), fundada en el siglo XIV, Komparu (金春), Kita (喜多), y Kongo (金剛). Cada escuela tiene una familia principal conocido como Sō-ke, y la cabeza de cada familia tiene el derecho de crear las nuevas obras o revisar las piezas existentes. La sociedad de actores de nō es totalmente feudalista, y estrictamente protege las tradiciones heredadas de sus antepasados.
Obras nō famosas
(Categorizada según la escuela Kanze)
Aoi no uye--"La Dama de la Corte Aoi" (Categoría 4)
Dojoji--"Dojoji" (Categoría 4)
Hagoromo --"El Manto de Pluma" (Categoría 3)
Izutsu -- (Categoría 3)
Matsukaze -- (Categoría 3)
Sekidera Komachi -- Komachi a Sekidera (Categoría 3)
Shakkyo --"El Puente de la Piedra" (Categoría 5)
Shojo --"El Elfo de Tippling" (Categoría 3)
Yorimasa --"Yorimasa" (Categoría 2)
Yuya --"Yuya" (Categoría 3)
Máscaras en las obras nō
Todas las máscaras utilizadas en las representaciones de nō (能面 nō-men o 面 omote, característica) tienen nombre.
Usualmente sólo el Shite, el actor principal, lleva máscara. Sin embargo, en algunos casos los Tsure pueden también llevarlas, en particular para roles femeninos. Las máscaras nō son usadas para representar a un personaje femenino o no humano (divino, demoniáco o animal), existiendo también máscaras para representar jóvenes o ancianos. Por otra parte, los actores de nō que no llevan máscara repersentan el rol de adultos alrededor de los veinte, treinta o cuarenta años de edad. El waki, tampoco lleva máscara.
Cuando son usadas por un actor experimentado, las máscaras nō poseen la habilidad de representar distintas emociones de acuerdo a la postura de la cabeza y a la iluminación. Una máscara inanimada puede tener apariencia de felicidad, tristeza o una variedad de sutiles expresiones. Estudios realizados por Michael J. Lyons del ATR Intelligent Robotics and Communication Labs en Kyoto, Japón, y Ruth Campbell, del University College London, han explorado este notable aspecto de las máscaras.
Influencia en el teatro occidental
La apertura de Japón, al final del siglo XIX, suscita el interés de varios artistas occidentales. En 1921, el poeta Paul Claudel, a la sazón embajador de Francia en Japón, quedó impresionado por la estructura dramática del nō y su musicalidad. Esta idea queda expuesta en algunos de sus textos críticos como El Nō y El Drama y la música. La influencia que el teatro nō pudo tener sobre la dramaturgia misma de Claudel es sobre todo formal. Al mismo tiempo en Irlanda, Yeats, Premio Nobel de literatura en 1923, se inicia en el nō y se impregna de todo su arte. Stanislavski o Meyerhold examinan también la dramaturgia japonesa, y hacen algunas experiencias de puesta en escena, pero inspirándose más bien en el kabuki por su aspecto más coloreado y exóticamente espectacular. Bertold Brecht, después de haberse apasionado por el teatro chino, adapta en 1930 una obra nō : Taniko, bajo el título Der Ja-sager (aquél que dice sí).
Más recientemente, los nō modernos de Yukio Mishima, gracias a la traducción francesa de Marguerite Yourcenar, dieron a conocer a la opinión pública algunos elementos esenciales del nō, como los "fantasmas vivos" o las metamorfosis animales.
Actualmente en Suiza, el director de teatro Armen Godel, apasionado del nō y traductor del japonés, monta en particular obras de Racine, Corneille o bien del mismo Mishima, impregnándolos del yūgen (palabra típica del 'nō' que René Sieffert traduce como encanto sutil). En Francia, desde 1980, la puesta en escena por el director de teatro Junji Fuseya inicia a artistas occidentales a la técnica adaptada de su propia formación tradicional de nō y kyōgen. Es necesario tener en cuenta aún la inspiración que ciertamente Peter Brook encontró en Yoshi Oida, con el cual trabajó de numerosos años.